Fernando González Llort

Fernando González Llort

Fernando González Llort, nació en Ciudad de La Habana, el 18 de agosto de 1963; de procedencia social obrero; hijo de Magaly Llort Ruiz y Fernando Rafael González Quiñones. En 1968 inicia sus estudios primarios; cursó del primero al cuarto grado en la escuela Mártires latinoamericanos; y, posteriormente el quinto y sexto grados en la escuela “Vo Thi Tan”, ambos en Ciudad de La Habana.

Desde muy temprana edad se caracterizó por su seriedad y dedicación a los estudios, y siempre obtuvo buenos resultados docentes. En 1973 inició sus estudios secundarios en la ESBEC José Martí, en Batabanó, actual provincia Mayabeque, los cuales concluyó, posteriormente, en la ESBEC José Martí, en San Antonio de los Baños, Artemisa. En esta etapa se incorporó a la FEEM, donde ocupó cargos al nivel de aula.

Entre 1978 y 1981, cursó estudios en el preuniversitario José Carlos Mariátegui, en el Municipio Especial Isla de la Juventud, y resultó estar entre los tres primeros expedientes de su curso.

En 1981, ingresó en las filas de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), como resultado de su ascendente trayectoria estudiantil y política. De 1981 a 1987, cursó estudios universitarios en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales Raúl Roa García (ISRI), ocupando diversos cargos en la FEU y UJC, proyectándose como dirigente estudiantil ejemplar, con una elevada conducta y lo que lo llevó a graduarse con Diploma de Oro.

Durante sus estudios universitarios se destacó, además, en la promoción de eventos culturales y participó activamente en los festivales de teatro del centro de estudios.

Entre 1987 y 1989, cumplió misión internacionalista en la República Popular de Angola, en una brigada de tanques, asumiendo con estoicismo los rigores de la contienda militar. Al finalizar su misión, recibió las medallas Combatiente Internacionalista de segunda clase, y Por la victoria Cuba-República Popular de Angola.

Como consecuencia de su amplia trayectoria política, en 1988, se le otorgó la militancia del Partido Comunista de Cuba (PCC). Siempre se ha caracterizado por su madurez, sentido de responsabilidad y exactitud en el cumplimiento de las tareas a él asignadas.

A raíz del incremento de las actividades terroristas y provocadoras que tuvieron lugar en la década de los 90, Fernando sale a mediados de ese período a cumplir misiones de control y obtención de información sobre el accionar de varios cabecillas y miembros de las distintas organizaciones contrarrevolucionarias radicadas en la Florida.

El 12 de septiembre de 1998, es detenido junto a Gerardo Hernández Nordelo, Ramón Labañino Salazar, Antonio Guerrero Rodríguez, René González Sehwerert y otros 7 agentes de la seguridad cubana, en La Florida, acusados de conspiración para cometer espionaje y de conspiración contra la seguridad nacional de los Estados Unidos.

Es recluido en el llamado hueco por 17 meses.

La primera acusación en su contra presentada por la Fiscalía fue de sólo 9 páginas, donde apenas había referencias a hechos, y predominan los adjetivos y los calificativos. Fue una maniobra para ganar tiempo hasta que se presentó una segunda acusación, en mayo de 1999, ocho meses después de la detención. Fue entonces cuando se presentó el cargo de conspiración para asesinar, basado en la supuesta relación de uno de los acusados, Gerardo Hernández Nordelo, con el derribo de las avionetas que violaron el espacio aéreo cubano en febrero de 1996.

Dicha acusación sería el tema principal de la mafia terrorista y de las campañas escandalosas e incesantes de la prensa de Miami. En esta ocasión contaba de 40 páginas, con cargos suficientes para abrir el proceso y más documentada, en la intención de tipificar las supuestas acciones cometidas. En realidad fue un montaje urdido durante 8 meses para complacer a los enemigos de Cuba. Con ello quedó demostrado de modo inobjetable que se estaba en presencia de un juicio político, claramente amañado y manipulado.

Fueron tres los cargos presentados en su contra:

  • Conspiración, que consiste en un acuerdo para cometer delito contra los Estados Unidos o engañar a ese país.
  • Falsificación de documentos o hacer declaraciones falsas ante autoridades gubernamentales para obtener documentos.
  • Agente extranjero, consistente en actuar como agente de un gobierno extranjero sin ser diplomático ni comunicarlo al Fiscal General de Estados Unidos. De la forma en que está tipificado el delito en el Código Penal norteamericano el delito no está en ser agente extranjero, sino en ser un agente extranjero sin estar identificado.

Fernando sería sentenciado el 18 de diciembre del 2001, en Miami, a 19 años de cárcel, bajo cargos de poner en peligro la seguridad de Estados Unidos.

En su alegato ante la corte, leído poco antes de recibir la sentencia, denunció la complicidad existente entre el gobierno de Estados Unidos y los extremistas anticubanos que actúan contra la Isla desde aquel país.

Durante la vista de sentencia general celebrada en Miami, Fernando se enorgulleció igualmente de haber sido uno de quienes han prevenido a su país de actos terroristas y reiteró que ni él ni sus compañeros nunca conspiraron contra la seguridad nacional de Estados Unidos, ni espiaron instalación estatal ni militar alguna de esa nación.

Cumplió parte de su condena en una prisión de Minnesota, alejado con toda intención del resto de sus compañeros. Posteriormente, sería trasladado a la prisión federal de Terre Haute, en el estado de Indiana y luego de ser resentenciado a una penitenciaría en el estado de Arizona.

El 13 de octubre de 2009, comenzó el proceso de resentencia, que concluyó el 8 de diciembre de 2009 en la Corte de Distrito de Miami que había sido dispuesto por el Onceno Circuito de la Corte de Apelaciones de Atlanta. La sentencia original de 19 años fue modificada a 17 años más 9 meses en prisión.

El 27 de febrero de 2014, tras cumplir íntegramente  la sanción, fue liberado y al siguiente día deportado a Cuba.

En junio de 2014, es designado vicepresidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), desee donde desarrolla una intensa actividad en pos de la liberación de sus hermanos aún presos en cárceles norteamericanas.